Como terapeuta, estoy aquí para ayudar a las personas a reconectar con su confianza y felicidad en un mundo que a menudo las pasa por alto. Los problemas como adicciones, miedos, culpas y enfermedades crónicas o mentales no son el verdadero enemigo; son solo síntomas. El verdadero reto está en la raíz, en esas heridas no tratadas que arrastramos. Y ahí es donde la hipnosis marca la diferencia: va directo al origen, trata la causa real y transforma la vida en un tiempo sorprendentemente corto y duradero.
Mi camino no ha sido sencillo, pero ha sido precisamente ese recorrido el que me ha llevado a ser quien soy hoy. Soy alguien que ha vivido en carne propia el dolor de no sentirse suficiente, de cuestionar mi valor y de llevar cargas que no me correspondían. La adolescencia me golpeó con la pérdida de mi padre, quien, tras años de luchar en silencio contra la depresión, decidió terminar con su vida. Nuestra relación era complicada: amor y frustración se mezclaban en un mar de incomprensión.
Me sentía culpable, como si no hubiera sido suficiente para él, y eso me marcó profundamente.La soledad, la duda y la sensación de no valer lo suficiente casi me llevaron al borde de la depresión.
Probé muchas terapias, pero siempre quedaba con la sensación de que los cambios eran temporales, hasta que en 2019 descubrí la RTT Hipnoterapia. Fue entonces cuando entendí que el suicidio de mi padre no fue mi culpa. A través de esta técnica, llegué a la raíz de mis creencias limitantes, pude soltar el peso que me oprimía y empecé a vivir de manera consciente, libre de las cadenas del pasado.
Hoy, tras años de aprendizaje, puedo decir con certeza que he encontrado el amor: amor por mí misma, por lo que soy y por lo que puedo ofrecer. Y eso es lo que me impulsa a ayudar a otros.
Vivo en España desde 1997, un lugar que se ha convertido en mi hogar. Mi apariencia, más que nada por mi altura, suele llamar la atención, pero siempre me he sentido parte de esta tierra. Soy una persona llena de energía, y la música es mi compañera constante, siempre presente en mi día a día. No me gustan las normas rígidas; creo que las reglas están para ser desafiadas, lo que me ha permitido aprender, crecer y nunca conformarme. Mi camino no ha sido fácil, pero cada reto me ha ayudado a entender profundamente a quienes atraviesan momentos difíciles. Soy una apasionada de la lectura, siempre buscando aprender más, ya sea en psicología, marketing o desarrollo personal. Además, tengo dos hijos maravillosos que sacan lo mejor de mí y me desafían constantemente, recordándome el poder del amor y el crecimiento diario.